- Precio muy asequible.
- Buena eficiencia energética.
- Mucho más veloz que un disco duro (HDD).
- Memoria TLC.
Review
El TR200 es el dispositivo de almacenamiento interno con mayor número de ventas de Toshiba. Se trata de una opción básica dentro del ámbito SSD, muy superior a cualquier disco duro convencional (HDD). También figura entre las unidades de estado sólido más económicas del mercado, junto al SanDisk SSD Plus y al Kingston A400.
Está disponible en tres tamaños distintos para guardar datos: 240, 480 y 960 gigabytes. Su conector es SATA y, obviamente, no brinda tanta velocidad como las potentes y caras interfaces PCIe NVMe. En cuanto a su controlador, apuntar que Toshiba ha optado por un Phison S11.
La lectura secuencial máxima del modelo es de 555 MB/s y su escritura de 540 MB/s. Esto le coloca por encima del Kingston A400 y el SanDisk SSD Plus, que proporcionan, respectivamente, 500 y 535 MB/s de lectura, y 450 MB/s de escritura. En valores aleatorios, los techos del TR200 están en 82.000 IOPS de lectura y, algo más, 88.000 IOPS, de escritura.
Como puedes ver en la siguiente imagen, la carcasa del producto es metálica y presenta un vistoso adhesivo, que cubre casi toda su parte frontal. En el reverso incluye una sencilla pegatina informativa.
La memoria flash está conformada con 64 capas y chips TLC. En este último aspecto no hay sorpresas. La resistencia de las memorias MLC es superior a TLC, sin embargo, son más caras y el objetivo de Toshiba ha sido aminorar costes para ofrecer un buen precio de venta.
El modelo entrega una resistencia de 60, 120 ó 240 TBW, dependiendo del tamaño de almacenamiento. Estos niveles no son especialmente destacados, al contrario de lo que sucede con el reducido consumo energético, cifrado en un máximo de 1,7 W. El dato no resulta demasiado importante en un PC, pero sí en portátiles, donde una mayor eficacia -sobre todo en relación a un disco duro- se nota en la autonomía de la batería.
La unidad da soporte para TRIM, una herramienta destinada a optimizar el rendimiento. Además, incluye un programa nativo suministrado por Toshiba, denominado SSD Utility, que nos permite realizar operaciones de administración, como renovar el firmware o comprobar el estado de funcionamiento.
En el interior de la caja hay un manual de usuario y el dispositivo llega protegido por una bandeja de plástico. La garantía es de 3 años, con asistencia técnica gratuita durante ese periodo.
Características
- Dimensiones: 10,0 x 6,9 x 0,7 cm.
- Peso: 45 g.
- Tipo: interno.
- Tecnología: unidad de estado sólido (SSD).
- Capacidad: 240 GB – 960 GB.
- Lectura secuencial: 555 MB/s.
- Escritura secuencial: 540 MB/s.
- Lectura aleatoria (4KB, QD32): 82.000 IOPS.
- Escritura aleatoria (4KB, QD32): 88.000 IOPS.
- Resistencia: 60 TBW – 240 TBW.
- Interfaz: SATA III.
- Factor de forma: 2,5″.
Opinión final
A modo de resumen, señalar que el TR200 es una opción de prestaciones básicas, que aumenta notablemente el rendimiento de un disco duro, sin requerir un gran desembolso. Su única desventaja está en su memoria TLC, inferior a las más costosas MLC.
Entre sus ventajas habría que destacar fundamentalmente tres. La primera y principal es su precio, que constituye su elemento diferenciador. En segundo lugar, subrayar su eficiencia energética que, como comentaba anteriormente, repercute positivamente en la duración de la batería de un portátil. Y, por último, están sus niveles de transferencia, medios en el ámbito SATA, pero muy superiores a los aportados por los discos duros convencionales. La diferencia respecto a estos se nota mucho, por ejemplo, en la velocidad de arranque del sistema operativo.
